lunes, 7 de junio de 2010

cocodrilita

fernandita perez reartes, con tus duendes y tu persistente obstinación en no madurar. tu padre no es recto, es un hijo de mil putas, fernandita perez reartes. y tu mamá se calló siempre, no porque tener un espíritu noble y bueno, no fernadita. tu mamá tenía pavura de vivir, y prefirió aguantar a jugarse por vos y por ella. no estás sola porque el amor todavía no te llegó. estás sola porque sos tonta, porque sos mezquina, egoísta e inaguantable. ay, fernandita, cuando tu abuela ese día te dijo: "avivate un poco, nena", fue porque la vieja era la única que la tenía clara en la familia. y vos que la consideraste desde tus primeros años como una bruja mala que siempre odió a tu papá y siempre maltrató a tu mamá. hay seres que confunden, fernandita. como cocodrilos en la orilla, camuflados en el camalotal. los camalotes, con el verde esférico de sus tallos y de sus hojas, ofrecen en la estación indicada flores increíblemente delicadas de pálido lila. te acercás enternecido por la belleza salvaje. y de debajo, una bestia de mil dientes te arranca el brazo. sos vos, fernandita perez reartes, bestia verde mal adivinada. con esa cara de opa, y con esa inocencia mentirosa de niña triste. las tontas como vos merecen algo mucho mas cruel que sus soledades eternas.