Ella me avisa que acaba de aprobar la última materia. Le queda la tesis nomás.
Se fue esta mañana a la ciudad universitaria con Agustina, Joaquín, contracciones y todo.
Qué bárbaro. Qué te puedo decir.
-Ahora, qué coraje esta mujercita no?
Es al pedo. Hay cosas que uno nunca va a lograr entender. Cargando con todo va y encima rinde y para colmo... aprueba!!
¡¡Eso es ponerle huevos señores!!
1 comentario:
las dos "o" de la palabra orgullo, son redondas como los ojos de uno cuando lo siente. y la "u" del medio, imita la placentera sonrisa que a uno se le forma en la cara...
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