no será el rigor con el que asumí la vida. ni el compromiso para mantener pedazos de coherencia atados con una voluntad agobiante.
no serán los amigos, fieles, perseverantes, los que hacen que uno sepa que ya nunca estará solo.
no serán los hermanos, sangre idéntica en otras venas, la genética compartida y la niñez en un mismo tronco.
no serán mis sueños. ni mis pocos logros.
tampoco los fracasos, ni las promesas que no he sido ni seré capaz de cumplir.
ni siquiera serán mis hijos, los que amo, por los que nazco y moriría cada minuto de la vida.
serás vos, y tus ojos.
vos, y tu silencio.
vos, y tu expectativa.
pasaré por el mundo dejándome todo, porque estamos para despojarnos y partir tan vacíos como llegamos.
solo algo me trascenderá, solo una historia servirá para contarme, para dejar registro de mi existencia.
solo algo por sobre todo.
si estoy por acá, es para llenarte, para que sea tu vida la que hable.
ya no importa si es ahora o en muchos años: el día de mi muerte, que se sepa, que se escriba al pie de la tumba: este hombre vivió para ella.
vos, laura mia, la de los ojos y los silencios, sos mi única causa.
todo, todo lo demás, el resto, yo mismo... somos tu consecuencia.